VIENE DE LA PÁGINA 1 Los 16 robos se cometieron en San Sebastián (6), Irún, Hernani, Antonia, Berriozar, Pamplona (3), Bera de Bidasoa, Lesaka y la localidad zaragozana de Cuarte de Huerva. Según la información policial, la investigación se inició en marzo de 1999, tras el atraco del trío a una entidad bancaria de Berriozar, en el que, como era habitual en el grupo, usaron pelucas, gafas oscuras, gorras y otras prendas para ocultar su identidad. Se llevaron más de cinco millones de botín y, a pesar de la persecución de la Policía Municipal de la localidad, lograron huir, pero dejaron algunas pistas.
Asaltaban en puntos donde no residían. Sin embargo, no pudieron evitar que el derroche de dinero del que hacían gala llamara la atención en otro sitio distinto: Santander. En la capital cántabra llevaban una vida normal. Nunca atracaban. Gracias a la colaboración ciudadana la Guardia Civil siguió sus pasos. Sin actividad laboral reconocida, gastaban grandes cantidades de dinero en establecimientos públicos de la ciudad, clubes de alterne, restaurantes y bares, preferentemente.
Tras más de un mes de vigilancia, el pasado 9 de febrero fueron detenidos en el centro de la ciudad cuando la Guardia Civil tenía constancia de que no portaban sus armas.
En el registro de sus domicilios en San Sebastián, Pasajes y Santander se incautaron teléfonos móviles, documentación, un revolver con 10 cartuchos, una pistola, dos pelucas, dos gafas oscuras, dos gorros de lana, una gorra y otras prendas de camuflaje usadas en los ataques a entidades bancarias. Habían sido detenidos en otras 10 ocasiones
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 13 de febrero de 2000