El fuerte viento que desde el pasado miércoles sopla en las comarcas de Tarragona obligó ayer a los bomberos a realizar numerosas salidas para retirar árboles caídos. Uno de ellos ha dejado sin luz una zona de Cambrils. Las rachas de viento, que en El Perelló (Baix Camp) alcanzaron los 180 kilómetros a la hora, originaron graves problemas de circulación. La nieve, por otra parte, hizo ayer acto de presencia en el Pirineo occidental, donde cayó en abundancia y obligó a cerrar al tráfico el puerto de La Bonaigua.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de febrero de 2000