La explosión el viernes de dos bombas artesanales en un autobús que viajaba a bordo del transbordador encargado de conectar dos islas del sur de Filipinas ha dejado un saldo de al menos 44 muertos y 35 heridos. Otras cinco personas se dan por desaparecidas. Un helicópero militar que transportaba medicinas hasta el lugar del suceso cayó el domingo en una zona boscosa de la isla de Mindanao y sus siete ocupantes también resultaron heridos.
Fuentes militares filipinas han acusado del atentado al MILF, un grupo separatista musulman que pretende crear un Estado islámico en Mindanao. Sin embargo, el MILF ha negado estar en el origen de la explosión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de febrero de 2000