La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ordenó ayer, a petición de su presidente, Augusto Méndez de Lugo, la apertura de un expediente informativo para aclarar un altercado en una bar nocturno en el que supuestamente participó el titular del juzgado de instrucción número 2 de Almuñécar, Agustín Fernández-Fígares. La Subdelegación del Gobierno en Granada fue la que pidió al órgano judicial que investigara el incidente ya que a su entender el juez trató de manera vejatoria a los agentes de policía que acudieron al establecimiento. Al juez se le imputa un comportamiento similar en otro incidente ocurrido el 17 de febrero.La Sala de Gobierno del tribunal incluyó de manera urgente en el orden del día el requerimiento hecho por el representante del Gobierno central para que investigara la actitud del juez, de unos 40 años, por si hubiera incurrido en algún tipo de responsabilidad.
El altercado se originó a las 5 de la madrugada del sábado cuando el juez, con síntomas evidentes de ebriedad, acusó al portero del local de haberle robado 35.000 pesetas. El cliente se indentificó como juez y amenazó a sus interlocutores con "empurarlos". Éste originó una primera discusión a grandes voces que se zanjó cuando llegó la policía, según informó ayer el diario Ideal.
Los agentes pidieron al cliente que se identificara pero éste alegó que no disponía de documentación. Los policías comprobaron que efecto se trataba de un juez y decidieron llevarlo a comisaría. Una vez allí, según la versión oficial, el hombre trató a los funcionarios de forma descortés y avasalladora.
Esta circunstancia fue la que movió a los policías a comunicar lo ocurrido a la Subdelegación del Gobierno en Granada para que a su vez pusiera en conocimiento del tribunal andaluz el desagradable incidente.
El subdelegado del Gobierno, Julián Urbano, remitió el pasado fin de semana un escrito al presidente del TSJA con un meticuloso relato de lo ocurrido. Urbano declinó ayer hacer comentarios sobre el altercado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 1 de marzo de 2000