Los administradores judiciales del Atlético consultaron en días pasados al secretario técnico del club, Miguel Ángel Ruiz, sobre la posibilidad de rescindir el contrato del técnico Claudio Ranieri. Como sustituto propusieron al entrenador del equipo filial, Fernando Zambrano. Pero Ruiz lo desaconsejó por entender que es arriesgado hacer un cambio de tales dimensiones en la recta final de la temporada, cuando el Atlético sigue embarcado en las tres competiciones -Copa, Liga y Copa de la UEFA- que inició en la era Ranieri. Además, Ruiz consideró que "Ranieri está trabajando bien", aunque esta opinión no sea exactamente compartida por los administradores, que ven con desaprobación cómo Ranieri se enfrenta a los aficionados o declara, como hoy, que sólo se iría del Atlético si el ex presidente, Jesús Gil, se lo pide.En ese marco se enfrentan el Atlético y el Lens esta noche en el Manzanares, donde el público rojiblanco se muestra cada vez más intolerante con Ranieri. Ambos equipos chocarán (20.15, Vía Digital y en Internet, en la dirección www.terra.es/deportes) en el partido de ida de octavos de final de la Copa de la UEFA.
Un ambiente cargado preside el partido contra el Lens, un habitual de la mitad de la tabla en Francia que ganó la Liga de su país en 1998. Visita a un Atlético con la afición crispada. La crisis ha llevado a Rubí a plantearse la destitución de Ranieri, según el propio técnico confirmó ayer. Al explicar su opinión sobre la cuestión -ya sea de su enfrentamiento con un aficionado, o de la crisis- Ranieri dejó constancia de que permanece siendo fiel al ex presidente del club, Jesús Gil, y de que moverse en ríos revueltos le resulta estimulante: "Rubí consultó a [el secretario técnico] Miguel Ángel Ruiz, y es lógico que dude de mí, porque no sabe de fútbol. Pero yo no me voy, salvo que me eche Rubí. Soy de los que dan la cara hasta el último minuto. Sólo me iría si me llama Gil y me dice: 'te doy las gracias, vete'. Entonces doy las gracias a todos y me voy".
La Copa de la UEFA puede ser un buen motivo para animar a la afición -según Ranieri- y una causa potencial para desatar su ira si el partido sale mal. Para evitarlo, Ranieri se plantea cambiar de sistema y ha ensayado un nuevo dibujo: tres marcadores centrales -Gamarra sería el líbero-, tres volantes, dos laterales largos y dos delanteros.
Atlético: Molina; Aguilera, Santi, Gamarra, Ayala, Capdevilla; Hugo Leal, Baraja; Valerón; Kiko y Hasselbaink.
Lens: Warmuz; Sikora, Fanfan, Ismael, Queudrue; Blanchard, Dacourt, Brunel, Coridon; Rodríguez y Sakho.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 2 de marzo de 2000