Rosalind Mark estuvo cuatro años al servicio de Tony y Cherie Blair. Cuidó desde 1994 a 1998 a sus tres hijos -Euan, Nicholas y Kathryn- y acompañó a la familia en su salto desde el "desordenado" piso de Islington a Downing Street, la residencia oficial de los primeros ministros británicos. Allí conoció a grandes personalidades -desde la reina Isabel II hasta Hillary Clinton- y sirvió el té a los ministros de Tony Blair. Pero la joven cuidadora está ahora en apuros. Ha escrito las memorias sobre su estancia con los Blair, cuyo resumen preliminar se publicó ayer en las primeras ediciones de The Mail on Sunday. El artículo tuvo que retirarse de la tirada final tras la intervención de los abogados del primer ministro. Implacable defensor de la intimidad de su familia, en especial de todo lo que afecta a la vida de sus pequeños, Blair solicitó y obtuvo un interdicto legal que prohibía la publicación de sus secretos domésticos. El dominical promete recurrir a los tribunales, y Rosalind Mark, de 30 años, protesta que nunca fue su intención sacar el libro sin el permiso previo de sus antiguos señores. "Nunca publicaría nada que pudiera avergonzarles. Alguien ha entregado parte de mis memorias al periodico sin mi autorización", señala en su defensa la niñera.- ,
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de marzo de 2000