Un empujón de Vidakovic a Aguilera pudo convertir en penalti -y en victoria- el primer partido de Antic al frente del Atlético. Pero el árbitro no pareció creer conveniente pegar el silbatazo. Aguilera entró al área del Betis y Vidakovic le mandó al suelo. En los vestuarios, tras el partido, nadie tenía dudas. "¿Por qué no pitó el árbitro?", le preguntaron a Aguilera en la sala de prensa. "No lo sé, chico. El penalti ha sido muy claro y el árbitro lo ha visto. Eso es lo que más me fastidia. Que es una situación que puede decidir un partido, es grave, y el árbitro no se atrevió a señalar el penalti", declaró un resignado Aguilera. Por su parte, Vidakovic, recordó el hecho sancionable: "Aguilera entró al área y yo lo derribé. No tengo ninguna duda de que ha sido penalti. En ese momento, me giré y pensé que el árbitro lo había señalado pero descubrí que no y me dije: bueno, mejor para el Betis".Antic consideró que el árbitro se había equivocado, después de verificarlo con "el protagonista": "Hemos hablado en el vestuario y Aguilera me ha dicho que el árbitro pudo pitarlo pero no lo hizo. De todas formas, Cuéllar ha controlado un balón con el brazo en su área y tampoco ha pasado nada".
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de marzo de 2000