El PP, con casi el 54% de los votos, ha arrinconado a los partidos de la izquierda y los nacionalistas que gobiernan en Baleares desde el pasado verano. Los populares han arrebatado un diputado a los socialistas, de los que se distancian en 25 puntos, y han derrotado a las dos candidaturas unitarias al Senado en Menorca e Ibiza y Formentera. Fueron los más votados en todos los municipios del archipiélago y hasta ganaron con amplitud en los feudos de los socialistas y los insularistas, excepto en el pueblecito de Costitx, del que es alcaldesa la nacionalista Maria Antònia Munar. IU ha cedido la mitad de su electorado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 14 de marzo de 2000