Milicianos en el frente de Aragón, miembros del Partido Obrero de Unificación Marxista (POUM) en Leciñena, soldados cerca de Fraga... son algunas de las escenas de la guerra civil españolas inmortalizadas por la cámara del genial fotógrafo Robert Capa que podrán contemplarse a partir del próximo 8 de abril en el Centre d'Estudis de la Batalla de l'Ebre (CEBE), ubicado en Gandesa (Terra Alta). Se trata de un total de 27 fotografías que pertenecen a una colección de 205 imágenes donadas por el hermano del fotoperiodista, Cornell, al Museo Nacional Reina Sofía de Madrid, el cual cede la exposición itinerante para que pueda ser exhibida en la pequeña población tarraconense hasta el próximo 11 de septiembre.Las instantáneas, cuyo valor total se estima en 14 millones de pesetas, recogen en su mayoría episodios de la batalla del Ebro, especialmente del frente de Aragón, y fueron tomadas en los alrededores de Huesca, Leciñena, Santa Eulalia, Teruel, Móra d'Ebre y Fraga entre agosto de 1936 y noviembre de 1938. Aunque en el conjunto que compone la exposición no se encuentra la conocida imagen titulada Muerte de un miliciano, uno de los iconos más simbólicos de la contienda, la exposición en blanco y negro da testimonio de fragmentos de una guerra que Capa vivió de cerca, fiel al consejo que a menudo daba a sus compañero: "Si tus fotografías no son lo bastante buenas, es que no estás lo bastante cerca". El fotógrafo, como se podrá comprobar en Gandesa, no sólo dejó testimonio de la destrucción causada por los bombardeos en las zonas urbanas y de los acontecimientos en el calor de la batalla, sino también del sufrimiento de los soldados a través de sus rostros, del aburrimiento en las trincheras y del dolor de las mujeres. Por ello, aunque Capa ha sido clasificado básicamente como un fotógrafo de temas bélicos, en realidad quiso dejar constancia de los sentimientos que transmiten las personas sometidas a condiciones de extrema tensión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de marzo de 2000