El poderoso sindicato alemán IG Metall ha convocado desde la madrugada de mañana una serie de paros para presionar a la patronal, cuando las negociaciones entre empresarios y trabajadores están en pleno apogeo.Los paros afectarán a un mínimo de cinco de los 16 estados regionales (länder) que existen en Alemania. La central IG Metall, que representa a unos 3,4 millones de trabajadores de la metalurgia y de la industria eléctrica de todo el país, ha convocado paros de dos horas a partir de la medianoche de hoy.
El sindicato exige un aumento del 5,5% de los salarios para todas las regiones a las que afecta la negociación colectiva. La patronal ha fijado el tope máximo en una subida del 2,6%. Asimismo, IG Metall pide que los trabajadores puedan jubilarse a los 60 años. Éste es uno de los principales puntos de divergencia entre las partes negociadoras.
Antes de optar por la huelga, los trabajadores y los empresarios mantenían una tregua negociadora que finalizará esta noche. Uno de los primeros paros se realizará en la fábrica que DaimlerChrysler tiene en Sindelfingen -en el oeste del país-, que emplea a unos 20.000 trabajadores. También se prevén movilizaciones en Baviera, donde se encuentra la central de Audi.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de marzo de 2000