El grupo de alimentación Eroski, que el pasado sábado retiró de sus establecimientos partidas de yogures en mal estado -de la marca Consumer- señaló ayer que "la situación está controlada y no hay motivos de alarma". Además, la empresa aseguró "no tener constancia" de posibles afectados por la ingestión de estos productos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 28 de marzo de 2000