La plataforma Salvem El Cabanyal acudirá a los tribunales si la Generalitat aprueba el plan especial elaborado por el Ayuntamiento para la prolongación de la avenida de Blasco Ibáñez, que partirá el barrio en dos. Los abogados y los técnicos que apoyan a los afectados por el proyecto están convencidos de que ningún juez autorizará un proyecto "decimonónico" que supone una agresión al patrimonio histórico. Miembros de la plataforma acudieron ayer a las Cortes Valencianas para informar a los grupos socialista y de Esquerra Unida de las repercusiones que el proyecto tendrá para los inmuebles catalogados como bien de interés cultural. Los técnicos contrarios al plan municipal retaron al Ayuntamiento a presentar un solo informe "que diga que es legal" y aseguraron que contraviene la ley de Patrimonio.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de abril de 2000