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Tribuna:

San Pedro, del PP

¡Es demasiado! Hasta San Pedro, el que negara a Jesús tres veces, es del PP. Por estos pagos del sur, se desconocía que Aznar, Arriola y Rajoy -por este orden- lo tuvieran en la nómina de los peperos clandestinos. Pero este secreto, mantenido en el más absoluto de los silencios, ha saltado hecho añicos, a Dios gracias, por ese trotón irredento de nombre Antonio Sanz, alter ego de Teófila Martínez.El moderado y conservador Sanz, en la mayor despensa de aceite del mundo que es Jaén, desveló que San Pedro bendito derramó de los cielos litros de agua para quitar a los socialistas el argumento de que Andalucía tiene sed, se quiebran y resecan sus tierras, las cementeras se quedan sin sembrar y los barbechos hieren la vista de los caminantes. Antes, la Iglesia hacía rogativas; ahora no hace falta. Sanz, con hilo directo con San Pedro, tiene la solución. Agua va, la tierra se empapa y vuelven las canales a sonar cantarinas en los pueblos, se ponen verdes las colinas y las amapolas florecen con las lluvias de abril, aguas mil, como dice el refranero.

Los socialistas andaluces, que vienen culpando al Gobierno de Aznar de no haber cumplido sus promesas en la puesta en marcha del plan nacional de regadíos y exigido la gestión de las cuencas, han quedado desarmados por el fino y profundo análisis de Sanz en tierras jiennenses o el no menos preclaro, sublime y definitiva exposición del conseguidor Villegas, presidente de la cuenca del Sur, que afirma que con el agua caida, al menos en dos años habrá agua para todos.

Aznar, que en la pasada legislatura no movió ficha para solucionar el grave déficit hídrico en Andalucía, competencia del Gobierno central, tiene ahora una nueva oportunidad. La Junta le ha recordado, en carta dirigida por el consejero Paulino Plata al ministro Posada, que el problema de la sequía en Andalucía es estructural, enumerando las deficiencias en la gestión de los recursos hídricos, que no invirtieran una sola peseta a la construcción de embalses; ni un metro cúbico nuevo de reserva de agua y negado la transferencia de las cuencas cuando ya las han cedido a otras comunidades.

Pero no hay que preocuparse en demasía. Sanz tiene hilo directo con San Pedro. El problema ya está solucionado.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de abril de 2000