En su última cita con la prensa en Pristina, el general alemán Klaus Reinhardt vino a reconocer el fracaso de los esfuerzos para cortar la actividad de la nueva guerrilla albanesa en el sur de Serbia. "El valle de Presevo constituye todavía mi mayor preocupación, a pesar de las recientes garantías ofrecidas por los grupos que operan allí de que continúan la lucha por medios pacíficos", señaló al referirse al Ejército de Liberación de Presevo, Medvedja y Bujanovac (ELPMB), que actúa desde hace semanas en esa región serbia. Observadores militares y analistas políticos señalan que el ELPMB desarrolla una táctica similar al Ejército de Liberación de Kosovo.Reinhardt no vaciló en declarar ayer: "Con franqueza, cuando nosotros vemos que ellos [el ELPMB] se entrenan con morteros en la zona de Dobrosin, sencillamente no los puedo creer". Y añadió: "Ellos [el ELPMB] deberían saber que la Kfor continuará enfrentándose a sus actividades ilegales hasta que entreguen sus armas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de abril de 2000