El delegado de la Comisión Europea en México, Manuel López Blanco, afirmó ayer que la denuncia de inversores japoneses sobre la falta de seguridad en el país es una clara señal que podría poner en riesgo su desarrollo. "La seguridad es un problema importante que las autoridades saben que tienen que enfrentar y lo están haciendo, ya que significa un coste para las empresas que buscan una plataforma de producción", dijo.López Blanco destacó que "las empresas multinacionales que no quieren asumir ese riesgo [la inseguridad pública] llevarán sus inversiones a otros países, lo cual es malo para México, por lo que estamos interesados en que ese riesgo disminuya lo antes posible".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de mayo de 2000