La operación de la Guardia Civil contra el empleo de sustancias prohibidas en la alimentación humana, la sanidad animal y los productos fitosanitarios (desarrollada entre el 15 de febrero y el 31 de marzo) se ha saldado con 358 establecimientos denunciados en la Comunidad Valenciana. Las sanciones han recaído sobre explotaciones ganaderas, farmacias, comercios, almacenes e industrias del sector.En total, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha denunciado a tres de cada cuatro establecimientos valencianos inspeccionados: 358 de los 450. Sin embargo, el Seprona detalló que no han impuesto ninguna denuncia penal ni han detenido a nadie (todas son denuncias administrativas), porque ninguna de las infracciones comprobadas afecta seriamente a la salud humana.
"Se trata, sobre todo", abundan en el Seprona, "de denuncias por no estar inscritos en el Registro de Sanidad o por no etiquetar y almacenar correctamente los productos". Los agentes reconocen que el principal objetivo de la operación era descubrir prácticas de engorde artificial de ganado con clembuterol, pero no han hallado ningún caso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de mayo de 2000