El vicepresidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Kevin Gosper, pidió disculpas ayer por haber aceptado que su hija sea la primera portadora de la antorcha olímpica en los próximos Juegos de Sydney 2000. La prensa australiana se volcó de manera unánime a la hora de criticar a Gosper, como muestra la portada de ayer del periódico Daily Telegraph, que califica a Gosper con adjetivos a partir de las letras de su apellido: "Avaro, Obstinado, Egoísta, Pomposo, Ególatra y Rufián".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de mayo de 2000