El ministro de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, descartó ayer la posibilidad de emplear tropas españolas en nuevas operaciones de paz en la ex Yugoslavia, al margen de las ya comprometidas. Preguntado por la eventual participación de España en una fuerza de la ONU para el Sáhara, alegó que Marruecos no ha planteado formalmente ninguna petición, pero que "ampliar los objetivos no está en los cálculos del Gobierno".El ministro reveló que España ha desestimado ya algunas peticiones para mandar soldados al extranjero, aunque no especificó más. Otra cuestión, precisó, es la posibilidad de reforzar la presencia militar en los países donde ya existe, como Kosovo, lo que estudiará el Gobierno cuando reciba el requerimiento oficial de la OTAN.
Trillo-Figueroa hizo estas declaraciones a su llegada a Mostar (Bosnia-Herzegovina), en una visita de menos de 48 horas a las tropas desplegadas en los Balcanes. En Bosnia-Herzegovina, donde los soldados españoles llevan ocho años, el ministro recibió las explicaciones del general José Luis Barrón. Aunque la situación en la zona ha mejorado, lo que redujo los efectivos de la OTAN de 30.000 a 19.000 y los españoles de 1.500 a 1.200, aún subsisten dificultades, según el ministro, que obligarán a permanecer aquí cinco años más.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de mayo de 2000