Dos detenidos, cinco kilos de cocaína aprehendidos y un laboratorio clandestino desarticulado. Ése es el resultado de la Operación Roble, llevada a cabo por agentes de la comisaría de Hortaleza-Barajas en la calle de Malagón, número 2. También ha permitido la desarticulación de una red de boleros (personas que se introducen bolas de cocaína en el estómago) que distribuía el estupefaciente por la región, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía. La proximidad con el aeropuerto de Barajas facilitaba la llegada de los boleros, que expulsaban las bolas de droga. Después se cortaba con sustancias adulterantes, se prensaba y se empaquetaba en pastillas de medio kilo en el laboratorio. Las investigaciones se centraron en las personas que actuaron de correos. Todas se dirigían a la calle de Malagón. Los agentes detuvieron allí a Julián David R. H., de 20 años, y a Eduardo Eugenio N. R., de 40. Habían ocultado una bolsa con 1,5 kilos de cocaína.
En el registro de la vivienda hallaron el resto de la droga, una prensa metálica, dos básculas, dos recipientes con acetona, productos químicos adulterantes, además del laxante que usaban los boleros para facilitar la expulsión de la droga por el intestino grueso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 4 de junio de 2000