"El Estado de Palestina será proclamado dentro de algunas semanas", aseguró ayer el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, en el transcurso de una asamblea que militantes y dirigentes del partido gubernamental Fatah celebraron en Nablús, a un centenar de kilómetros al norte de Jerusalén. Arafat aseguró que "las semanas que vienen serán cruciales", y convocó a los asistentes a seguir de cerca los debates del Consejo Central, que a partir del próximo 2 de julio se celebrará en Gaza y de donde podría salir la fecha para la proclamación del Estado.Las palabras de Arafat, poco después de entrevistarse en El Cairo con el presidente, Hosni Mubarak, provocaron la indignación del Gobierno israelí, que a través del ministro de Asuntos Exteriores, David Levy, aseguró que "Israel no se plegará a las amenazas durante las negociaciones. Es impensable que Arafat nos diga: dadnos esto o proclamaremos un Estado cuando nos convenga".
El Gobierno de Ehud Barak afronta mientras tanto una nueva crisis. El ministro de Interior, el dirigente de la minoría rusa Nathan Sharansky, amenaza con retirarse del Gabinete, llevándose con él a siete parlamentarios "si las negociaciones siguen por este camino", es decir el de las supuestas concesiones territoriales a los palestinos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de junio de 2000