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Hospitales públicos de Madrid reducen incluso a la mitad muchos de sus servicios durante el verano

De los 12 quirófanos del hospital Puerta de Hierro, seis se cierran en agosto. De las 1.041 camas del Clínico, sólo 651 permanecerán operativas dentro de dos meses. El hospital Virgen de la Torre, con 90 camas, volverá a cerrar por obras este verano y las 44 camas de urología del hospital de Getafe quedarán clausuradas hasta octubre. Éstos son algunos de los datos recabados por las plataformas de usuarios y trabajadores en defensa de la sanidad pública que demuestran que la sanidad pública española semicierra por vacaciones a pesar de las listas de espera, y no sólo en Madrid, aunque de momento su información detallada se circunscriba a esta región."Se esgrime la excusa de que en verano disminuye la demanda, pero por lo que se vuelve más lenta la actividad es porque no hay dinero para sustituciones. Lo demuestra el escándalo de las listas de espera en cirugía cardiaca", dice Juan Luis Ruiz Giménez, médico y miembro de una de las plataformas. "En verano se dejan al mínimo las operaciones programadas y también quedan reducidas drásticamente las consultas diagnósticas".

Los datos recabados por estas plataformas son anteriores al plan de choque anunciado por Aznar, pero cuando se confeccionó el programa de vacaciones en consultas y hospitales las autoridades sanitarias ya sabían que en el Insalud, por ejemplo, la espera media para ser operado del corazón era de casi cuatro meses, muy por encima de lo aconsejable en tan graves patologías.

La responsable de Sanidad de IU, Ángeles Maestro, recordó que el cierre de dotaciones sanitarias se produce en un país cuya tasa de camas hospitalarias (4,3 por cada 1.000 habitantes) es de las más bajas de Europa.

Miembros de estas plataformas, como Jaime Baquero, del sector de enfermería, deploran el déficit de recursos y personal que sufre la sanidad pública española. "Es verdad que tenemos uno de los sistemas mejores del mundo y que el personal está saturado y agotado, pero no es lógico, por ejemplo, que el nuestro sea uno de los pocos sistemas que no tiene organizados turnos de tarde en consultas y hospitales".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de junio de 2000