En este mismo momento se agitan 50 conflictos armados en el mundo. Y otro conflicto: el de prevenir o paliar las crisis humanitarias provocadas por los enfrentamientos y lograr después, en lo posible, la convivencia entre las partes. Éste es el tema del coloquio internacional Crisis Humanitarias y Reconciliación, que comenzó ayer en Madrid, en la Casa de América, y finaliza el viernes. Las primeras ponencias versaron sobre la importancia vital de prevenir los conflictos y las crisis humanitarias. El enjuiciamiento de los violadores de los derechos humanos es una condición básica para la reconciliación de las partes enfrentadas, de acuerdo a la opinión de Álvaro Gil Robles, comisionado de Derechos Humanos en el Consejo de Europa. Al hilo de esta declaración, el debate abierto tras las intervenciones tuvo un protagonista indiscutible: Pinochet.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 29 de junio de 2000