El documento político que marcará la estrategia de Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) en los próximos años descarta tanto la posibilidad de ser absorbida por el PSC como recomponer el espacio de la izquierda transformadora junto a Esquerra Unida i Alternativa (EUiA), socio catalán de Izquierda Unida. El presidente de IC-V, Rafael Ribó, presentó ayer este documento, que será discutido mañana en la Comisión Política Nacional antes de su debate y aprobación final en la 6ª Asamblea (congreso) de Iniciativa, que se celebrará en noviembre.El texto, coordinado por el mismo Ribó a pesar de que éste abandonará la presidencia en la asamblea, apuesta por reafirmar en el futuro el proyecto de "izquierda verde y nacional". Al mismo tiempo, Ribó pretende que la asamblea de IC-V ratifique su compromiso a fondo con la estrategia unitaria de las izquierdas en Cataluña que él ha impulsado en los últimos años.
A la hora de replantearse cómo crecer y de qué manera IC-V puede contribuir a romper "la hegemonía de la derecha" en Cataluña, el líder ecosocialista aboga por ensanchar el espacio de "la izquierda transformadora" con la que se identifica a través de la acción política y descartando "nuevas alianzas" con EUiA, nacida en 1998 a partir de una escisión de IC-V.
"Lo hemos intentado tres veces y siempre han acabado en ruptura; no volveremos a cometer este error", aseguró Ribó en referencia a las alianzas que en el pasado suscribió con el Partit dels Comunistes, hoy integrado en EUiA. El presidente de IC-V consideró que la "motivación última" de la ruptura con IU fue la "cuestión nacional". En consecuencia, Ribó mostró sus reservas ante una aproximación a IU. "No queremos que [las políticas] se decidan en Madrid", añadió.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 30 de junio de 2000