La segunda prueba de las oposiciones municipales para cubrir 50 plazas de bomberos llevó ayer a 749 atletas hasta el gimnasio, donde tuvieron que aprobar distintos ejercicios físicos; entre ellos, subir cinco metros a pulso por una soga preparada al efecto. En la imagen, un candidato intentaba superar la prueba, ante la atenta mirada de compañeros y examinadores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de julio de 2000