Leo Blair, de dos meses, será bautizado el sábado en una iglesia católica del noroeste de Londres. No sólo ha sido el primer bebé nacido en los últimos 150 años en Downing Street, sino que el cuarto y más famoso hijo del líder laborista británico, Tony Blair, y su esposa, Cherie, está así a punto de sentar otro precedente. Aunque su padre es un devoto protestante, será educado, como sus tres hermanos mayores, en la fe materna. A la ceremonia han sido invitadas unas 120 personas, entre familiares, vecinos y amigos. Si bien el matrimonio Blair ha tratado hasta ahora de proteger la intimidad de su prole, será la primera vez en que el primogénito, Euan, de 16 años, aparezca en público desde que fuera recogido ebrio por la policía en pleno centro de Londres. Es de suponer que esta vez todos estarán más relajados, incluida la señora Blair, que ha sido criticada esta semana por regresar demasiado pronto al trabajo. Y sobre todo por hacerse llevar a Leo a la Cámara de los Lores para darle de mamar en los descansos de una vista en la que actuaba como letrada. Un gesto de lo más natural si no fuera porque sus señorías no suelen estar para lactantes.-ISABEL FERRER,
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 27 de julio de 2000