El sector moderado de Convergència Democràtica, agrupado en torno a la plataforma Catalanisme i Progrés, se felicitó ayer por el contenido de la ponencia política del congreso de noviembre, dirigida por el futuro secretario general del partido y consejero de Economía, Artur Mas, porque a su juicio ha recogido la mayoría de los postulados que defienden."El documento base", se afirma en un comunicado, "marca la orientación correcta para que CDC, con este proyecto renovado, pueda seguir siendo el punto de referencia del catalanismo político y el interlocutor más sólido para la sociedad catalana". Es decir, se defiende el actual contenido de la ponencia frente al sector más soberanista del partido, que lo considera poco nacionalista y ya ha anunciado la presentación de diversas enmiendas.
Catalanisme i Progrés aboga por que Convergència siga ocupando el centro político en Cataluña y se abstenga de firmar un pacto de legislatura en el Parlament, optando por los acuerdos coyunturales con el resto de las formaciones políticas. En el comunicado se evita siempre referirse al término nacionalismo y se opta por la palabra catalanismo "como eje vertebrador de la centralidad política".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 5 de agosto de 2000