Elizabeth Taylor, de 68 años, se encuentra hospitalizada con un leve caso de neumonía en un centro médico de Los Ángeles, según informó ayer su portavoz, Warren Cowan. Pese a ser leve la enfermedad, la actriz lleva ingresada desde el pasado viernes en el Cedars-Sinai (el mismo hospital donde ayer nació el hijo de Catherine Zeta-Jones y de Michael Douglas). Esta nueva dolencia de la actriz vuelve a traer a la memoria su frágil salud. Además de diversas neumonías, la actriz ha superado en los últimos años problemas en la espalda, diversas operaciones de cadera e incluso un tumor benigno en el cerebro que le fue extirpado en 1997. También padeció una arritmia cardiaca en 1995, un shock como consecuencia de la operación cerebral y un año más tarde, en 1998, una caída la costó una fractura en un hueso de la espalda. Además, la protagonista de Cleopatra también ha superado diferentes adicciones, ya sea a la bebida o a los calmantes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de agosto de 2000