Los organizadores de la caza de pederastas desconvocaron la manifestación prevista anoche en Portsmouth (sur de Inglaterra), y aceptaron dialogar con las autoridades. La protesta comenzó hace una semana y ha desembocado en disturbios causados sobre todo por adolescentes y madres. Otra familia -la quinta- ha huido de la ciudad. Las autoridades la han trasladado a una residencia temporal. Barbara Roche, secretaria de Estado de Interior, recordó ayer que el Gobierno ha prometido revisar el registro oficial de pederastas. "Pero necesitamos hacerlo en un ambiente de calma", señaló. La responsable ministerial criticó la oleada de ira vecinal desatada tras la publicación en el dominical News of The World, dos semanas seguidas, de listas de pederastas. El semanario suspendió el domingo pasado la campaña.
La claudicación del dominical, propiedad del magnate Rupert Murdoch, fue fruto de la presión de la policía, de asociaciones de defensa de menores, y de responsables de servicios sociales ante la acumulación de víctimas inocentes. El parlamentario Robin Collet pidió el miércoles el procesamiento del periódico por incitar al desorden. "Estaba claro cuál sería el desenlace de su campaña", dijo.
Por otra parte, la revista luxemburguesa L'Investigateur ha enviado a algunos suscriptores una lista de 50 supuestos pederastas belgas, según su director, Jean Nicolas. La distribución se ha realizado pese a que un tribunal de Namur (Bélgica) había prohibido su difusión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 11 de agosto de 2000