La junta directiva de Woolwich, especialista británico en préstamos hipotecarios, aceptó ayer la oferta de adquisición por valor de 5.400 millones de libras (cerca de un billón y medio de pesetas) efectuada por el grupo Barclays. La operación permite al cuarto banco comercial de Reino Unido realzar su posición e imagen dañadas en los últimos meses por problemas técnicos en el servicio de Internet y el cierre de sucursales en zonas rurales del país. La fusión llevará al despido de al menos mil empleados y al cierre de un centenar de sucursales, ubicadas principalmente en el sur de Inglaterra, donde compiten ambas entidades.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de agosto de 2000