38 de los 46 inmigrantes que el pasado miércoles saltaron cerca de Pasaia (Guipúzcoa) del buque Unity XI, en el que viajaban como polizones, abandonaron ayer sobre las 21.00 horas el puerto con destino a Casablanca (Marruecos). Los otros ocho son menores, por lo que han quedado bajo la tutela de la sección de infancia de la Diputación Foral de Guipúzcoa. Los inmigrantes, marroquíes y argelinos, abandonaron el puerto guipuzcoano sin haber recibido asistencia letrada. SOS Racismo y el Colegio de Abogados de Guipúzcoa denunciaron al Gobierno por "conculcar" este derecho.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de agosto de 2000