- ¿Qué son? Las orugas son formas larvarias de las mariposas. Se alimentan de materias vegetales y, muy raramente, de sustancias animales. Tanto en sus formas como en el color que tienen son animales variados y diversos. Lo mejor es olvidarse de ellas, ni siquiera hay que olerlas; ni, por supuesto, consentir que se acerquen a los alimentos. - ¿Qué hacer? Pero, si por cualquier circunstancia se llegara a contactar con ellas, debe saberse que enseguida aparecerá en la zona de piel afectada un tono rojizo; luego se sentirán ciertos e inquietantes picores y puede que, incluso, se produzca una pequeña inflamación. En algunos casos el contacto con las orugas puede llegar a provocar conjuntivitis, debido, sobre todo, a la dispersión aérea de los pelos urticarios que portan. Si, por error, se ingiriesen, lo más probable es que se contraiga una gastroenteritis. El simple hecho de olerlas puede acarrear irritación de nariz y, a algunas personas, alergia.
Consejos médicos
Director: Allan Kroeker. Intérpretes: Tom Burlison, Raymond Burr, Donnelly Rhodes.
- Los remedios. Para extraer los pelos que deja la oruga adheridos a la piel, el esparadrapo es mano de santo; un método eficaz y sencillo. A continuación hay que lavar la zona afectada con un antiséptico y cubrirla con una loción de hiposulfito sódico al 50%. Si la situación se complica, debe acudirse al centro de salud para que sea el médico el que indique las medidas a adoptar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 21 de agosto de 2000