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Reportaje:VERANO 2000DÓNDE IR...

El atractivo de las vaquillas La Sierra de Segura y El Condado, en Jaén, celebran sus fiestas

Las fiestas patronales en las sierras de Segura, Cazorla, Las Villas o El Condado, en la provincia de Jaén, no pueden entenderse sin el elemento taurino como eje central. Desde abril, con el popular toro ensogado de Beas de Segura, hasta octubre, donde la singular plaza rectangular de Segura de la Sierra despide los festejos, son innumerables las citas con sabor taurino.Pero es ahora, en pleno agosto, cuando estos pueblos celebran mayor número de encierros de toros y vaquillas y se convierten en reclamo turístico para los muchos visitantes de la serranía jiennense.

Dos buenos ejemplos son las localidades de Hornos de Segura, una pequeña atalaya sobre el pantano de El Tranco, y Santiago de la Espada, el municipio más oriental de Jaén. Las calles y plazoletas de estos dos pueblos se convierten hasta el 20 de agosto en escenarios taurinos improvisados. En Santiago de la Espada se conserva incluso la costumbre de traer las reses -dos novillos y veinte vacas este año- directamente al pueblo desde el campo guiadas por jinetes y cabestros.

Los antitaurinos siempre podrán practicar el deporte autóctono de los bolos serranos, cuyos orígenes se remontan al siglo XIII y que consiste en lanzar con una bola de pino carrasco uno o tres mingos (así se llama a los bolos más pequeños). Si parecen pocas las opciones, se puede probar algún deporte náutico en el pantano de El Tranco o perderse por las aldeas de la vega del río Segura, que nace muy cerca de allí, en Pontones.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de agosto de 2000