El presunto pederasta de Castellón, Antonio G., de 60 años de edad, admitió ante la titular del juzgado número 5 de Castellón haber tenido algún tipo de contacto con menores, aunque, según ha trascendido de su declaración, éstos se limitaron a masajes "no libidinosos". El detenido se encuentra en prisión desde el pasado sábado, después de un exhaustivo registro domiciliario, en su vivienda de la capital de La Plana, y de un interrogatorio que se prolongó durante más de dos horas. Fuentes oficiales descartaron que el individuo formara parte de un red.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de agosto de 2000