La eterna polémica arbitral sobre los fueras de juego podría convertirse en un borroso recuerdo del pasado si el artefacto ideado por el inventor belga Antoon Soetens da resultado.Soetens anunció el miércoles pasado que había conseguido crear una herramienta electrónica que puede dictaminar con un cien por cien de seguridad si un jugador se encuentra en posición irreglamentaria o no. El instrumento ya ha sido probado con éxito en un encuentro disputado el pasado sábado entre dos equipos belgas aficionados. Soetens afirma que si la FIFA le autoriza en 2001 veremos su artefacto, junto al tradicional silbato, como parte fundamental de la equipación de todos los árbitros del mundo. "Ya hay una empresa belga fabricándolos", agrega el inventor, que confía ciegamente en su invento del que asegura que "no tiene ninguna desventaja y si todas las ventajas".
Sin embargo un portavoz de la FIFA ha declarado que "ve muy problematico el uso de este tipo de aparatos", además agregó que "el factor humano, el error, es una parte importante del juego". Por su parte un miembro del colegio de árbitros belga ha confirmado que este colectivo se reunirá el sábado próximo para dicutir las caracteristicas del nuevo invento.
Para Soetens el secreto de su invento "está en su simplicidad". Un sensor transmite una señal a un receptor central cada vez que un jugador realiza un pase, mientras otro emisor manda una señal cada vez que un jugador está cerca del fuera de juego. Si la señal del segundo transmisor es la primera en llegar al receptor central es que hay fuera de juego.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 31 de agosto de 2000