"Los brigadistas no habían recibido la formación adecuada". A esa conclusión ha llegado Comisiones Obreras (CC OO) tras evaluar las circunstancias en que se produjo la muerte de dos personas en Oencia (León) durante la extinción, el pasado lunes, de un incendio. Ambos, a cuyos funerales asistieron ayer 800 personas, tenían años de experiencia, pero, según el sindicado, "la experiencia no suple a la formación".La central afirma que cada vez mueren más personas apagando incendios no sólo por su falta de aprendizaje, sino también por el incremento en la subcontratación de las cuadrillas de extinción a empresas privadas, "que abusan de los trabajadores y los someten a un alto riesgo".
Joaquín Nieto, secretario confederal de Medio Ambiente y Salud Laboral de CC OO, anunció ayer que el sindicato se personará en el procedimiento judicial abierto "para que se esclarezcan las condiciones en que [los brigadistas] estaban trabajando" y "su muerte no quede impune", ya que se sospecha que el fuego fue provocado.
También criticó Nieto las políticas que se aplican para acabar con los incendios, "que están fracasando", y citó la educación, que "no va dirigida a quienes queman los montes". Además, propuso que se aumente la inversión dedicada a prevenir y no sólo extinguir el fuego y aseguró que con la inversión de 180.000 millones en prevención, que crearían 50.000 empleos, se reducirían los siniestros.
Ayer ardieron 500 hectáreas en Salamanca y 150 en Buendía (Cuenca) en un incendio causado por un rayo y que anoche aún no estaba controlado, informa Nuria Amago.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 31 de agosto de 2000