La contratación ilegal de inmigrantes en las obras de construcción de la urbanización Cumbres del Sol, en Benitatxell (Marina Alta) no cesa. CC OO asegura que, pese a sus denuncias, los inmigrantes siguen trabajando en condiciones que rayan la explotación y exige una actuación "contundente y urgente" de la Inspección de Trabajo. La promotora de la urbanización, la mercantil VAPF, ha hecho público un comunicado en el que se desvincula del problema.
La contratación ilegal de inmigrantes en la urbanización Cumbres del Sol fue denunciada por el sindicato ante la Inspección de Trabajo y la Fiscalía el pasado mes de mayo. Estos trabajadores extranjeros (un centenar de personas, la mayoría ecuatorianos y magrebíes) trabajan una media de 10 horas al día, reciben un salario de unas 500 pesetas a la hora, no están dados de alta en la Seguridad Social y habitan en unos barracones (casetas de obras) habilitados en la urbanización.Francisco Velasco, responsable de Salud Laboral de CC OO de L'Alacantí, asegura que no se ha avanzado nada desde que el sindicato denunció los hechos. "La clave está en una actuación contundente y urgente de la Inspección de Trabajo", comentó. "La Fiscalía (en este caso el fiscal de extranjería) nos ha comentado que hasta que no reciba actas de la Administración relativas a presuntos delitos contra los trabajadores extranjeros, no puede actuar", añadió el sindicalita.
Por su parte, el grupo VAPF, empresa promotora de la urbanización, en un comunicado subraya que no tiene nada que ver con la supuesta contratación ilegal de inmigrantes y asegura que ha denunciado ante la Guardia Civil la ocupación ilegal de sus casetas de obras. "De esta forma la empresa quiere dejar claro que nada tiene que ver con un problema que siempre ha sido más social que laboral", recoge la nota.
En el comunicado la promotora asegura que va a solicitar una reunión con el sindicato CC OO "para aclarar definitivamente el malentendido". Velasco expresó su sorpresa ante este anunció de la empresa: "Es difícil entender que la promotora no sepa para quién trabajan los inmigrantes, y en cualquier caso es un asunto que tiene que resolver la Inspección y la Justicia".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 18 de septiembre de 2000