El sindicato Unió de Pagesos ha declarado la guerra a las grandes superficies comerciales que venden leche a un precio inferior al del coste de producción. Los ganaderos consideran que el producto no ofrece ninguna garantía de calidad al consumidor. Un grupo de ganaderos de Lleida destruyó más de 500 litros de leche de un supermercado de esta ciudad que vendía este producto a 63 pesetas. Los ganaderos pretenden que la Administración obligue a los grandes comercios a vender leche de la misma calidad que la que producen ellos. Con este argumento, los manifestantes se apoderaron de todos los envases de leche de una marca alemana que encontraron en un establecimiento de la cadena Lidl y vertieron su contenido en la calle. El propietario del supermercado presentó una denuncia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 29 de septiembre de 2000