Los norteamericanos Beachwood Sparks se encuentran inmersos en una gira por la península que incluye dos actuaciones en Euskadi. Hoy (22.30) tocarán en el Gazteleku de Oñati y el próximo viernes (22.00) harán lo propio en la sala Azkena Kafe Antzokia de Bilbao, compartiendo tablas en ambos casos con los hermanos Javier y Alejandro Escovedo. Será una buena ocasión para revivir y empaparse de lo que Gram Parsons llamó en su día, refiriéndose a las canciones de sus Flying Burrito Brothers, "música cósmica". De hecho, Beachwood Sparks se ha ganado la comparación con la banda de Parsons, The Byrds y Buffalo Springsfield con un estreno discográfico en el que abundan las melodías que han dado gloria al pop, sonidos tomados del country y flecos psicodélicos. La fusión que dio lugar durante los años sesenta a la llamada "música cósmica".
El cuarteto se formó hace tres años en California con la unión de miembros de Further, Strictly Ballroom, Kxlu y Lilys, bandas que se podían encuadrar en géneros como el post rock y la psicodelia. Y probablemente aún sería un conjunto prácticamente desconocido de no ser porque el sello Sub Pop reparó en su música y le brindó la oportunidad de publicar el álbum que ahora presentan. Doble sorpresa, ya que sus composiciones son totalmente diferentes al estereotipo de punk rock y contundente rock alternativo asociado a la discográfica, y se engloban en un estilo que ni siquiera está muy extendido en Estados Unidos, donde están ancladas sus raíces y han surgido sus mejores exponentes.
"La música popular americana está en uno de sus momentos más bajos", reconoce el cantante Brent Rademaker.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 11 de octubre de 2000