La mayoría de los empleados de los ayuntamientos guipuzcoanos de Hernani, Astigarraga y Errezil, todos ellos gobernados por EH, acudieron ayer a sus puestos de trabajo para no conmemorar las "fiestas españolas". La decisión municipal se produce después de que un juzgado suspendiese de forma cautelar el acuerdo adoptado en un pleno de la corporación de Hernani para considerar laborable el pasado 25 de julio, festividad de Santiago. Los tres municipios volverán a considerar laborable el Día de la Constitución.
Las oficinas municipales de Hernani, Astigarraga y Errezil permanecieron ayer abiertas, aunque la afluencia de público se vio muy mermada al tratarse de un día festivo. Esos tres municipios guipuzcoanos secundaron una iniciativa impulsada por el consistorio de Hernani para convertir de hecho en día laboral las festividades de Santiago, el Pilar y la Constitución, en un intento de boicot a las "fiestas españolas".En Hernani, el municipio más populoso de los tres (18.671 habitantes), el Ayuntamiento funcionó como en un día laborable. Acudieron la mayoría de los funcionarios y los nueve concejales de EH, incluida la alcaldesa, Mertxe Etxeberría. Los ocho ediles de la oposición no secundaron la iniciativa.
Al mediodía, los empleados municipales y varios vecinos se concentraron en la plaza Berri para reclamar "el derecho a elegir libremente los días festivos".
Varios comercios de esta localidad despacharon durante toda la jornada. También abrieron los dos centros de enseñanza de euskera para adultos -AEK y HABE-, pero la asistencia de alumnos fue muy baja. Algunos estudiantes del instituto acudieron al centro escolar, aunque no se impartían clases.
La decisión de los empleados municipales se produce dos meses y medio después de que el Juzgado número 1 de lo Contencioso-Administrativo de San Sebastián se ratificara en su decisión de suspender cautelarmente una resolución adoptada por la comisión de gobierno del Ayuntamiento de Hernani que declaraba laborable la festividad de Santiago. La decisión judicial respondía a un recurso presentado por los ediles de EA-PNV de dicho consistorio.
Mertxe Etxeberría anunció entonces que no pondría trabas a los empleados de su Ayuntamiento que quisieran trabajar ese día, el 12 de octubre y el 6 de diciembre. La alcaldesa también garantizó que las oficinas municipales permanecerían abiertas durante las tres jornadas.
En Astigarraga (3.202 habitantes), población vecina de Hernani gobernada también con mayoría absoluta por EH, la asamblea de trabajadores decidió acudir al Ayuntamiento. Apoyaron la decisión 25 de los 31 empleados que forman la plantilla. De toda la corporación, sólo asistieron ayer la alcaldesa, Elixabette Laburu, y algunos ediles independentistas. Los comercios y centros de enseñanza de la localidad no abrieron.
En Errezil (666 habitantes), trabajaron los cuatro empleados que tiene el Ayuntamiento y el alcalde, Iñaki Labaka, pero no así los concejales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de octubre de 2000