La multinacional del sector de la electrónica japonesa Sony anunció ayer que suprimirá 400 empleos de su planta de Bidgend, situada en Gales. La medida es parte de un plan de reestructuración de la compañía para reducir costes de producción. Sony emplea unas 3.100 personas en Gales, respartidas casi equitativamente entre las factorías de Bridgend y Pencoed.La planta que sufrirá la eliminación de puestos de trabajo produce televisores digitales y cámaras de vídeo profesionales. "Estamos muy consternados por la medida que hemos decidido, pero la supervivencia económica de la fábrica depende de ello", declaró ayer Tony Abbott, director general de Sony para el Reino Unido.
Las empresas japonesas son las que más han protestado al primer ministro Tony Blair por retrasar el acceso del Reino Unido al euro. La fortaleza de la libra ha hecho perder competitividad a las empresas y las japonesas, empezando por Nissan, han amenazado con irse del país.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 17 de octubre de 2000