Un joven de 28 años permanece en estado grave tras ser alcanzado por una piedra que un grupo de cuatro menores de entre 11 y 15 años lanzó contra un tren a su paso por Creixell (Tarragonès). La piedra rebotó en el convoy e impactó en el cuerpo del joven.Fuentes de la Policía Local de Creixell informaron que los hechos se produjeron hacia las 19:30 horas del pasado sábado, cuando los menores pasaban el rato arrojando piedras a los trenes desde el un paso peatonal. La fatalidad quiso que una piedra impactara contra el tren que en esos momentos pasaba por la zona en dirección a Barcelona, saliera rebotada y alcanzara a la víctima, un vecino de Sitges (Garraf) que paseaba con su novia.
El joven resultó herido en la cara y en el pecho y fue trasladado al Hospital de Santa Tecla de Tarragona, de donde lo derivaron al Joan XXIII de esa ciudad y más tarde al Clínico de Barcelona. Aunque aún se encuentra en estado grave, la víctima ha salido ya de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital barcelonés.
Vecinos de la zona que habían presenciado los hechos alertaron a la Policía Local de que la piedra había sido lanzada por un grupo de niños que los agentes pudieron localizar momentos después. La Policía Local ha instruido las correspondientes diligencias, que ha remitido a la Fiscalía de Menores de Tarragona, mientras los niños se encuentran a disposición de sus padres, a la espera de la decisión del fiscal.
Fuentes de Renfe explicaron que los apedreamientos de trenes son "incontrolables" y que se producen con cierta frecuencia. Renfe añadió que la mayoría de sus trenes están dotados de cristales dobles irrompibles.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 18 de octubre de 2000