Como psicólogo, mi sincera opinión es que Pinochet, don Augusto, sufre trastornos mentales de importancia e irreversibles, pero no de ahora, sino probablemente desde hace más de medio siglo.Para mí, no es éste el problema, sino averiguar cómo esta persona llega y tiene millones de seguidores que le apoyan durante la dictadura y aún hoy mantiene un número considerable de incondicionales. Franco es nuestro referente más inmediato.. .
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 18 de octubre de 2000