La Comisión Europea se mantiene de momento al margen de la fusión entre las dos compañías eléctricas españolas Endesa e Iberdrola. La comisaria europea responsable de Energía, Loyola de Palacio, declaró ayer en Bruselas que, mientras la alianza se concentre en el mercado español, es competencia de las autoridades españolas y que se limitará a analizar los detalles de la operación si traspasa las fronteras españolas."Sólo si se produce un intercambio de activos con otras empresas europeas, la Comisión está obligada a analizar la fusión", dijo, "porque en ese momento Endesa tendrá una proyección europea y estará obligada a notificar los acuerdos concluidos". "La compañía fusionada se ha comprometido a vender una parte de sus activos de producción a otras empresas, lo que hay que ver es si este intercambio de activos se realiza con empresas europeas", añadió.
Bruselas se mantiene a la espera de ver cómo culmina el proceso de fusión entre las dos compañías y tener todos los datos sobre la mesa antes de pronunciarse.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de octubre de 2000