La policía ha identificado en Alicante a una mujer que afirmaba resolver los problemas personales mediante la técnica de la videncia, pero que en realidad se dedicada a estafar a los clientes. La policía sospecha que la vidente, C. R., de 30 años, junto a su compañero, han podido estafar siete millones de pesetas a seis personas que habían acudido a su consulta. La vidente se anunciaba como Luana, profesional en el tarot y pedía a los clientes que no la molestaran durante dos días para poder entrar en trance. Luego aprovechaba para desaparecer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 24 de octubre de 2000