UGT y CC OO rechazan el proyecto del Gobierno autónomo, del PP, de abrir en tres años 16 centros de atención social para inmigrantes, a los que éstos llegarían derivados desde los servicios que atienden a todos los madrileños para recibir una ayuda más especializada. Los sindicatos consideran que esta medida, incluida en el Plan Regional de Inmigración, "segrega" a los extranjeros y temen que pueda generar susceptibilidades en la población autóctona "si ésta llega a creer que se halla en desventaja respecto a los inmigrantes". En su lugar proponen que se refuercen los servicios sociales de cada distrito o municipio para prestar el apoyo previsto en los nuevos dispositivos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 24 de octubre de 2000