"Vamos de circo en circo y hemos hecho nuestro papel y muy bien", se desahogó, en un tono sarcástico y mordaz, el dueño del Atlético de Madrid, Jesús Gil, tras la derrota de su equipo. Sus palabras tenían más de una justificación: "Parecemos los globetrotters y hemos realizado una buena promoción". También recurrió a "cosas extrañas", en referencia a los asuntos judiciales en que está envuelto Gil, para argumentar la complicada situación deportiva del equipo."Nos vamos a apuntar al baloncesto cómico", insistió Gil en su afán de comparar a su equipo con los globetrotters y después de plantearle qué soluciones puede dar a la crisis que atraviesa el Atlético. "Algo grave pasa y no sé lo que es", añadió el presidente del equipo madrileño. "Estoy desesperado. Somos incapaces de jugar al fútbol, de reaccionar y de hacer honor a la camiseta que llevamos", se lamentó el dueño del Atlético.
MÁS INFORMACIÓN
Jesús Gil aseguró que cada día que pasa será más dificil superar la situación. "El problema es que se han acostumbrado a perder [por los jugadores]", continuó Gil con sus lamentos. "No les veo aptitud de reaccionar. Son camisetas andantes. A este paso, después de la ruina que nos ha creado un modesto equipo como éste [por el Universidad] que con su ilusión nos ha barrido, va a ser muy difícil el ascenso. Esto es un desastre. No veo solución".
Jesús Gil no eludió su parte de culpa en esta situación. "Todos somos culpables", confesó al mismo tiempo que también recurrió a "cosas extrañas". "No nos dejan llevar al club con tranquilidad. Hay un interventor judicial...Los jugadores se ven afectados. No son tontos", dijo el dueño del equipo.
Marcos Alonso, que hace un par de jornadas llegó al cargo de entrenador al sustituir a Fernando Zambrano, recibió más de una llamada telefónica de Gil tras la derrota. "Ha sido el peor partido del Atlético, un golpe tremendo. No hay otra solución que trabajar", se limitó a decir el técnico.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 2 de noviembre de 2000