El País Vasco experimentó una contención del consumo interno durante el primer semestre de este año, mientras que la inversión matuvo su fortaleza, según el último informe de coyuntura de la Diputación de Vizcaya al que tuvo acceso la agencia Europa Press. El informe destaca la "fuerte desaceleración" de la adquisición de bienes duraderos, especialmente los automóviles. Sin embargo, el consumo de servicios se incrementó de una manera "sostenida". Todo parece apuntar, indica el estudio, que en la segunda parte del año se registrará una recuperación del gasto en alimentos, que parecía haberse "deprimido" al comienzo del ejercicio.Las ventas de automóviles en la comunidad autónoma descendió un 4,6% en mrazo y un 6,3% en abril. Así, entre enero y mayo se contabilizó una tasa que dista del gran crecimiento anotado en los primeros cinco meses del año pasado y que fue del 21,7%. Mientras, la evolución del índice de ventan en grandes superficies comerciales entre los meses de abril y junio mostró una leve recuperación. En cuanto a la inversión, el informe aprecia que en los cinco primeros meses se mantuvieron unas "apreciables" tasas de crecimiento.
Según los autores del trabajo, la pérdida de pulso del consumo interno ha estado provocada por el agotamiento del aumento de renta disponible generado por la reforma del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y por la pérdida de poder adquisitivo, derivada del aumento de los tipos de interés de los últimos meses y de la imparable escalada de precios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 2 de noviembre de 2000