Los seis participantes en la subasta por licencias de telefonía móvil de tercera generación (UMTS) en Austria ofrecieron un total de 111.645 millones de pesetas (671 millones de euros) tras la novena ronda, la última de la primera jornada de la puja, que se reanuda hoy. Telefónica de España presentó ayer la oferta más baja, 17.636 millones de pesetas (106 millones de euros), por dos frecuenciasMobilkom, filial de Telekom Austria, realizó la puja más elevada con 20.132 millones de pesetas (121 millones de euros) por dos frecuencias. Telefónica, que participa a través de 3G Mobile GmbH, presentó en la primera ronda de la puja la mayor oferta por tres frecuencias, 26.288 millones de pesetas (158 millones de euros). Esta primera ronda alcanzó 619 millones de euros (102.992 millones de pesetas).
En la segunda ronda, Telefónica pujó por dos frecuencias con una oferta de 8.818 millones de pesetas (53 millones de euros) por cada una de ellas, oferta que mantendría a lo largo del día.
Seis candidatos pujan por obtener entre dos y tres frecuencias de las doce disponibles, que darán derecho a la concesión de entre cuatro y seis licencias de telefonía móvil de tercera generación. La puja mínima para la atribución de frecuencias ha sido establecida por el Gobierno austriaco en 738 millones de euros.
De los candidatos a obtener licencias UMTS en Austria, cuatro ya operan en el país: Mobilkom Austria (filial de Telekom Austria), Max.mobil (perteneciente a Deutsche Telekom), One (consorcio internacional participado por la alemana E.ON, la danesa Tele Danmark y la noruega Telenor) y tele.ring (del grupo Mannesmann). Telefónica y el grupo de Hong Kong Hutchison Whampoa se presentan por primera vez en este mercado.
Después de la polémica subasta de UMTS en Italia, las autoridades austriacas han advertido a las seis sociedades en liza contra todo intento de acuerdos secretos que puedan desvirtuar la subasta
Austria cuenta con ocho millones de habitantes, más de la mitad de los cuales tiene teléfono móvil, lo que constituye una de las tasas de penetración más elevadas del mundo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de noviembre de 2000