Unos 250 alumnos de la Universidad de Barcelona cortaron ayer durante más de una hora todos los carriles de la avenida Diagonal en protesta por el retraso de las obras de la nueva facultad, frente a la Casa de la Caritat, y el estado en que se encuentran las actuales instalaciones. Estudiantes de Geografía, Historia, Historia del Arte, Filosofía y Antropología decidieron sacar las sillas a la calle como símbolo de la situación en que se ven obligados a recibir las clases. "Es igual dar clase en medio de la Diagonal que en los barracones y aulas indignas que tenemos", afirmaron.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de noviembre de 2000