Un año después de las protestas contra la globalización en Seattle, los líderes de los 21 países que componen el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) comienzan hoy una cumbre anual divididos sobre el grado de liberalización de los mercados internacionales, con países contrarios (Malaisia) y partidarios (EE UU) de una mundialización acelerada. El encuentro también intentará consolidar la recuperación de Asia tras la crisis financiera de hace tres años.La disputa ha cristalizado en el calendario que debe fijar el lanzamiento de una nueva ronda de negociaciaciones comerciales, que fue suspendido en diciembre del año pasado en Seattle debido a fuertes divergencias entre los países y en medio de violentas manifestaciones de los contrarios a la globalización. Los observadores tampoco esperan grandes decisiones en esta reunión.
De momento, los Gobiernos de la APEC hicieron ayer un llamamiento para iniciar, sin citar plazos, una nueva ronda de negociaciones bajo el auspicio de la Organización Mundial del Comercio. La APEC representa a dos tercios de la población del planeta y la mitad del volumen del comercio mundial. A la capital de Brunei viajarán el presidente de EE UU, Bill Clinton, el de Rusia, Vladimir Putin y el de China, Jiang Zemin.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 15 de noviembre de 2000